Libro sagrado de los antiguos Mayas, menciona que la raza humana fue creada por ‘Dioses Extraterrestres’

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El Popol Vuh es sin lugar a dudas, el más importante de los textos mayas que se conservan al día de hoy.

Según textos antiguos del pueblo k’iche’, el pueblo maya con mayor cantidad de población, indican que el hombre moderno no es el resultado de un proceso de evolución lineal; sino más bien de un proceso de creación cíclica, la cual es supervisado y controlado por ‘Seres’ o ‘Dioses extraterrestres’ de una mente muy superior. De hecho, estos textos se encuentran compilados en el libro titulado Popol Vuh (del k’iche’ popol wuj), el cual significa ‘libro del consejo’ o ‘libro de la comunidad’.

Cabe mencionar que el libro posee un gran valor histórico y espiritual, ya que atesora gran parte de la sabiduría y muchas de las tradiciones de la cultura maya. Es por ello que ha sido llamado el ‘Libro Sagrado de los mayas’, debido a que es un completo compendio de diversos temas tales como la creación, ascendencia, historia, astrología, mitología, etc. Además, sus cualidades literarias están a la altura de grandes obras épicas como el Ramayana hindú o la Ilíada, y la Odisea griegas. Sin embargo, el punto más interesante de esta obra es acerca del origen del mundo y de cómo surgieron los primeros seres humanos.

LOS CUATRO SERES O DIOSES CELESTIALES

Todo esto esta expuesto en el apartado de la primera parte del libro, titulado como ‘La creación‘. Aquí se mencionan los nombres de los cuatro Seres o Dioses celestiales, como El Creador, El Antiguo, Tepeu (El Dominador), y Gucumatz (La Serpiente Emplumada). Ellos fueron los Dioses que engendraron, los que dieron existencia, cerniéndose sobre el agua como una luz del amanecer. Fueron ellos los que crearon la Tierra, haciendo surgir del mar los valles y las montañas. No obstante, los dioses no conformes con lo que habían hecho, decidieron crear a seres que los veneraran y les hicieran ofrendas; siendo los tres primeros intentos un rotundo fracaso.

En el primer intento los dioses crearon a los animales de cuatro patas y las aves; pero al ver que estos eran incapaces de hablar y que no podían alabarlos, decidieron condenarlos a comerse unos a otros. En el segundo intento moldearon formas de vida a partir del barro, y a pesar de que los habían dotado con el don del habla estos carecían de coherencia e inteligencia. Aunado a esto eran bastantes frágiles e inestables, debido a que se deshacían al contacto con el agua. En el tercer intento deciden tallar figuras humanas usando madera, pero el resultado no fue para nada satisfactorio ya que estos seres eran meramente maniquís de madera. Los “humanos de madera” eran imperfectos y carentes de sentimientos, pues llevaban una vida inútil y vivían como los animales.

Por lo tanto los dioses castigaron su soberbia con un huracán, además de hacer que los animales, sus herramientas y las piedras se volvieran en su contra. Entonces los hombres de madera corrían de aquí para allá en desesperación, buscando refugio en los tejados, pero las casas se derrumbaron por debajo de ellos; trataron de subir a los árboles, pero los árboles les tiraban abajo; intentaron entrar en las cavernas, pero las cavernas se cerraban ante ellos. De esta forma se logró la destrucción de estas criaturas, salvo unos pocos de sus descendientes que ahora viven en los bosques como primates.

Ya en el cuarto y último intento, por fin los dioses logran su propósito al crear los primeros 4 seres humanos hechos de maíz. El nombre del primer humano fue Balam-Quitze; el segundo, Balam-Agab; el tercero, Mahucutah; y del cuarto, Iqi-Balam. Estos humanos no tenían ni padre ni madre, ni se hicieron por los agentes ordinarios en la obra de la creación, pero su venida a la existencia era un milagro extraordinario, causada por la intervención especial de los cuatro dioses mencionados en el libro. La humanidad sabía cumplir sus obligaciones con sus creadores, por lo que los dioses vieron que los seres humanos eran dignos de su origen.

Ya para concluir, en el libro del Popol Vuh tenemos descripciones detalladas de cómo los seres que no eran de la Tierra: El Creador, El Antiguo, El Dominador, y La Serpiente Emplumada, crearon al hombre. Estos seres habían tenido una comunión muy estrecha en varias ocasiones, y tras varios intentos, “ELLOS” crearon a la humanidad.

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