Roanoke: El misterio del pueblo maldito que desapareció sin dejar rastro

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La colonia perdida de Roanoke, es uno de los mayores misterios sin resolver en la historia de los Estados Unidos.

En 1585, un grupo de pioneros Ingleses comandados por Arthur Barlowe arribó a la isla de Roanoke, frente a las costas de la actual Carolina del Norte, EE.UU. Dicha colonia fue uno de los primeros asentamientos europeos en Norteamérica, ya que los colonos vivían en un entorno natural completamente nuevo para ellos. Cabe mencionar que aquellas primeras colonias tenían una alta tasa de fracasos, debido a la escasez de alimento, y donde el agua dulce era difícil de conseguir. Aunado a eso, no era fácil lidiar con los nativos de aquellas tierras. En 1586, debido a la carencia de recursos básicos y la mala relación con los nativos, el grupo decide regresar a Inglaterra; aunque poco después Richard Grennville volvería a Roanoke, dejando a un grupo de 15 soldados para mantener la guarnición.

La Reina Isabel I de Inglaterra, tenía la idea de establecer un asentamiento permanente en la isla de Roanoke, por lo que en 1587 un grupo comandado por John White y 117 colonos, entre ellos su hija embarazada, hombres, mujeres y niños, llegaron al lugar con la intención de llevar a cabo un segundo intento de colonizar la isla. Sin embargo, a su llegada los 15 soldados habían desaparecido, encontrando solo un esqueleto totalmente limpio. Esta vez los nativos se mostraron amables con los colonos, pero White tuvo que regresar a Inglaterra para informar la desaparición de los 15 soldados a la Reina. Su idea era regresar pronto a Roanoke, pero a causa de la guerra contra España, no pudo volver hasta tres años después.

Finalmente en 1590 White regresó a la isla de Roanoke, pero a su llegada los 117 colonos habían desaparecido misteriosamente, y sin dejar rastro alguno. Las casas estaban desmanteladas sin indicios de batalla o violencia, y no había informes de que hubiesen ido a otro lugar; solo encontraron escrito en un madero la palabra: “croatoan” y en el bosque tallado en un árbol las letras: “cro”, como si no hubiesen podido terminar de escribir dicha palabra. White tuvo que regresar nuevamente a Inglaterra, aunque jamás volvió a saber nada de su hija y nieta. Hay muchas teorías de qué fue lo que realmente pasó con la colonia de Roanoke, o a dónde fueron, pero nunca se han encontrado evidencias históricas de lo que ocurrió en el lugar.

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Posibles teorías de la desaparición de la Colonia de Roanoke

Si bien la colonia perdida de Roanoke es un misterio que lleva más de cuatro siglos sin resolverse, se han manejado varias teorías que tratan de dar con una respuesta más lógica. De hecho, John White tenía su propia teoría la cual tenía que ver con el grabado de la palabra “Croatoan” en el madero, ya que sugería que la colonia por alguna razón se había mudado a otra isla, (hoy conocida como Hatteras). Por lo tanto, alguien había tallado dicho nombre para darles una pista de donde se encontraban. White intentó ir a la isla para comprobarlo, pero para su mala suerte se desató una enorme tormenta, lo cual impidió que pudiera zarpar hacia aquella zona.

Otra teoría que se maneja tiene que ver con los duros climas que pudiesen haberse presentado en aquellas tierras. Se cree que en el segundo intento de colonizar la isla de Roanoke, las personas habían llegado en un momento malo, donde en aquellos años hubo sequías e inviernos muy duros. Con el tiempo los habitantes se fueron quedando sin suministros, y dado que no había suficientes fuentes de agua dulce en la isla, se quedaron sin comida antes de poder sembrar y cosechar nada. Pronto las condiciones para sobrevivir se pusieron aún más difíciles, provocando que los habitantes murieran de inanición, incluso hay quienes creen que practicaron el canibalismo ante la falta de alimento.

Por otro lado, algunos climatólogos mencionan que justo en esa época el volcán Billy Mitchel hizo erupción, provocando una hambruna en Europa. Esto pudo ser un factor determinante que llevó a algunos países europeos a explorar nuevas tierras en busca de recursos. Si bien este volcán está situado en la isla Bougainville en el Pacífico, su actividad volcánica afectó de una u otra forma el clima de todo el planeta en aquellos años. Esto pudo haberse reflejado claramente en las condiciones hostiles que se presentaron en la isla de Roanoke, y otras zonas de los Estados Unidos. Quizás esto justifique la alta tasa de fracasos durante los primeros intentos de colonizar nuevas tierras en Norteamérica.

Croatoan: La palabra maldita

“Croatoan” es el término que se utiliza para denominar a una tribu de nativos locales de la isla de Roanoke, además de que está asociada con las extrañas desapariciones de ese lugar; haciendo que la realidad y la leyenda se entrecrucen. Se dice que los Croatoans eran un pueblo fuertemente espiritista, que llevaba a cabo rituales para que los muertos volvieran de sus sepulturas y usarlos de esclavos en las cosechas.

De hecho hay una hipótesis que esta relacionada con lo paranormal, el cual tiene que ver con una especie de maldición entorno a la palabra ‘croatoan’. Se dice que la palabra tallada en el madero fue para soltar una plaga que asolaría la isla de Roanoke, provocando que la vida silvestre del lugar pereciera súbitamente de forma inexplicable. Las tribus cercanas decían que los Croatoan habían liberado un espíritu maligno y poderoso (el cual asociaban con una especie de reptil o serpiente), que hizo que los colonos enloquecieran y se mataran unos a otros.

Lo más descabellado del asunto es que este mismo demonio habría empujado a que las mismas personas se canibalizaran entre si, tal como si se tratara de un holocausto zombie. Esta última hipótesis es la menos aceptada; aunque de ser cierta la leyenda, implicaría la posibilidad de que hubiesen sucumbido al ataque de alguna tribu caníbal (de ahí que no se encontrasen restos de seres humanos), y que la celebración que aun hoy perdura en los Estados Unidos llamada ‘acción de gracias’, tal vez no fue un festín de pavo, sino de seres humanos. La realidad es que esto es muy poco probable, ya que no se tiene constancia de la existencia de ningún clan caníbal en la zona.

Supuestamente esta palabra ha estado envuelta en varios incidentes, aunque podría tratarse de meras especulaciones. Algunas de ellas es que en 1849, poco antes de su muerte y después de días desaparecido, el escritor Edgar Allan Poe, fue encontrado deambulando por las calles de Baltimore, susurrando la palabra “Croatoan”. En 1913, después de desparecer el periodista Ambrose Bierce, estaba esta palabra tallada en el poste de su cama. En 1921, estaba escrito “Croatoan” en la última página del diario a bordo del buque Carroll A. Deering, cuando este fue hallado sin nadie a bordo. En 1937, después de la desaparición de la famosa aviadora Amelia Earhart, fue encontrada entre sus pertenencias una revista garabateada con la misma palabra.

¿Mito o realidad?… Sin duda esta palabra es enigmática, y su misteriosa aparición sigue sin tener respuestas.

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